Pongamos que estas sola en casa y decides darte una ducha. Es posible que no haya sonado el telefono en toda la mañana pero ya verás en cuanto te enjabones empieza a sonar.
Es entonces cuando te asalta la duda, será importante o no. Bueno lo dejas sonar total si es importante volverá a llamar.
Pero el teléfono no deja de sonar i recapacitas. "Igual me dá tiempo de cogerlo".
Sales de la ducha esparciendo agua i jabón a diestro i a siniestro, te malsecas torpemente y resbalas dos veces jugandote la vida.
Tranquila, en cuanto te acerques a diez cm. del telefono. La llamada dejará de sonar ,segura.
Y casi mejor por que seguramente que si lo llegas a coger hubiera sido alguien que se habria equivocado de numero, excitando así tu vena violenta.
